Prepara tus pies para el calzado de otoño

Si te apasionan las botas , para ti seguramente no hay fecha en el calendario que te marque una pauta: las llevas durante todo el año. Pero también son muy numerosas las personas que varían de tipo de calzado en función del clima o de las estaciones,  y cuando llega el otoño es un momento crucial. Porque no se trata solamente de sustituir las sandalias por el calzado cerrado: se trata también de preparar los pies. 

Las temperaturas elevadas dilatan los pies, pero al llegar el otoño se contraen lentamente, reduciéndose el espacio que ocupan en el interior del calzado. La piel del pie durante el  verano puede desarrollar durezas y sequedades que, al encerrar de repente los pies, empeoran. También puede ocurrir que, con el roce del calzado cerrado sobre la piel que ha estado descubierta durante meses, se generen las temidas ampollas y rozaduras.

La cuestión es que, del mismo modo que cuidamos el calzado de piel, y cuando lo hacemos, se nota, con mayor motivo debemos cuidar de nuestros pies: lo notaremos todavía más. Veamos cómo.

 

Los calcetines transpirables: imprescindibles

Una de las mejores formas  de preparar el pie para comenzar a usar calzado cerrado después del  verano, es protegerlo con calcetines,  que minimizan cualquier molestia. Los podólogos también recomiendan alternar el tipo de calzado en función de la temperatura, sobre todo a comienzos de verano y de otoño, protegiendo los pies con calcetines para adaptar el uso de un zapato abierto a otro cerrado.

Pero atención, porque no todos los calcetines son iguales. Por ejemplo, si los vas a usar con tus botas cowboy, de trabajo o de motorista, tienes que procurar que no sean sintéticos ni demasiado cortos, ya que podrían hacer que el talón se deslice y sería complicado quitarse las botas. Esto lo puedes remediar usando los calcetines transpirables especiales que encontrarás en Corbeto’s. Puedes llevarlos con todo tipo de botas; son de media altura, ajuste firme,  muy cómodos, y mucho más duraderos que los calcetines deportivos o de vestir.

 

 

 

Proteger los pies de la humedad es igualmente importante: hay que procurar que permanezcan siempre secos. Si los pies se humedecen por el sudor o se mojan por cualquier otro motivo llevando calcetines, hay que cambiarlos. Cuando la humedad es producida por sudor, puede utilizarse algún producto específico recomendado por podólogos, ya que las humedades facilitan que proliferen hongos y bacterias, pudiéndose producir infecciones.

Para combatir la humedad que proviene del exterior, además de usar calcetines, si vives en un lugar particularmente lluvioso es aconsejable que optes por un calzado lo más impermeable posible, como por ejemplo, los icónicos botines Blundstone, que también encontrarás en Corbeto’s.

 

 

El cambio de altura del talón

Durante el verano es común usar calzado bastante plano, como las típicas sandalias, y a ello también se acostumbra el pie. Sin embargo, en otoño y en invierno el tacón normalmente se incrementa: incluso las botas cowboy de tacón más bajo, no tienen menos de 4 cm.

Este “cambio de altura” puede afectar a algunos pies sensibles, y a veces se produce fascitis ( inflamación del tejido de la parte inferior del pie)  o metatarsalgia (dolor e inflamación en la bola del pie o metatarso).

Aún así, que no cunda el pánico: si empiezas alternando calzado plano con el de tacón, tus pies se adaptarán antes y mejor al cambio de altura. Y por supuesto, si usas calzado de calidad, como todo el que encontrarás en Corbeto’s, el riesgo de padecer molestias en los pies será menor. 

 

 

Continuando con los cuidados de los pies, además de usar algún tipo de antitranspirante si sudan en exceso, también es importante hidratarlos a menudo, o incluso diariamente si se tienen muy secos. El corte de uñas también influye en el buen estado de los pies:  deberá ser un corte recto para evitar que las esquinas de las uñas se claven.

Y como alivio rápido para los pies hinchados y cansados… ¡ponte a bailar country line dance! No es  broma: la retención de líquidos que hincha los pies se irá reduciendo al bailar, y el country line en concreto tiene muchos beneficios tanto para el cuerpo como para la mente. ¿Todavía no los conoces? Pues ha llegado el momento de hacerlo, aunque para ello te harán falta un buen par de botas cowboy y un sombrero, no lo olvides.

Y ahora que ya sabes cómo preparar tus pies para afrontar el cambio de calzado, ya nada te hará parar de bailar, de pasear, o simplemente de disfrutar luciendo tu calzado favorito sin molestias.

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