Bandanas y pañuelos vaqueros: descubre mil formas de usarlos

Las bandanas y los pañuelos son accesorios que tienen cabida en todos los armarios. Se trata de prendas muy versátiles que pueden llevarse de muchas formas, y a pesar de su reducido tamaño, aportan un toque original a cualquier look. La bandana se ajusta a estilismos que casi son opuestos entre sí: es un complemento imprescindible en el estilo vaquero o country, pero tampoco falta en los outfits más chics y elegantes. 

Esto significa que las bandanas y pañuelos vaqueros, como los que encontrarás en Corbeto’s, pueden encajar prácticamente en todos tus looks diarios, sea cual sea tu estilo. Además de poder lucirse de muchas formas y ser de variados colores, las bandanas y los pañuelos vaqueros son complementos que tienen un precio muy asequible. 

Ya son varias temporadas consecutivas que las bandanas están muy bien posicionadas en la moda.

Años atrás, estos complementos estaban vinculados sobre todo con los estilismos vaqueros o country, pero en la actualidad, es frecuente ver bandanas en los desfiles de numerosos diseñadores. En este artículo vamos a ver todas las posibilidades que te ofrecen las bandanas y los pañuelos vaqueros: aprende las distintas formas de llevarlos.

 

 

La bandana en el cuello: un clásico

Incluso llevando la bandana al cuello, que es la forma más común, las posibilidades para lucirla son varias. El primer paso es doblar el pañuelo vaquero en un triángulo, y facilitará la tarea colocarlo sobre una mesa o superficie plana. El objetivo es formar una tira larga con la bandana. Para ello, hay que doblar la base del triángulo hacia arriba, entre 2,5 y 5 cm, en dirección a la punta del triángulo. Después hay que ir doblando el pañuelo en pliegues sucesivos hasta conseguir una forma rectangular estrecha.

Una vez doblada tu bandana, puedes llevarla anudada de lado con el lazo largo, con el nudo y el lazo en el centro, o bien dejando lazada y nudo detrás del cuello, sin que se vean. Si prefieres llevar la bandana de forma más suelta, llévala atada como si fuera una bufanda, sin nudo. 

 

 

También tienes otra alternativa muy cómoda y elegante para lucir tu bandana al cuello: usando un broche o pasador para pañuelos, como los que encontrarás en Corbeto’s. Estos broches metálicos unisex, de estilo cowboy y grabados con filigranas florales, surgieron de la necesidad de poder anudar y desanudar cómodamente los pañuelos al trabajar o cabalgar.

Con el tiempo, los broches para pañuelos acabaron por convertirse en bonitas alhajas y joyas. También son una alternativa a los corbatines western, y pueden colocarse con facilidad en pañuelos, bufandas y foulards de diferentes grosores y tejidos.

En la muñeca: un toque de desenfado

La bandana puede hacer la función de brazalete, aportando un toque de atractivo desenfado. Para conseguirlo, lo primero que hay que hacer es extenderla en toda su amplitud cuadrada, alisando los posibles pliegues. Después, gira la bandana para que una de sus esquinas quede frente a ti. Comienza a doblarla en pliegues delgados, y cuando ya tenga una forma rectangular estrecha, apoya el brazo sobre la bandana. Empieza a dar las vueltas necesarias alrededor de la muñeca, y remata con un pequeño lazo anudado. 

En el tobillo: un must de verano

Si en los meses estivales llevas shorts o vaqueros más cortos, una bandana anudada al tobillo combinada con unas deportivas blancas o unas sandalias lisas, aportará un toque rompedor. La forma de doblarla será la misma que la descrita anteriormente, hasta conseguir una forma rectangular estrecha, y después anudarla al tobillo.

 

En la cabeza: ¡todo posibilidades!

¿Buscas un look pirata irresistible, que además te proteja del sol ardiente en verano? Dobla tu bandana en diagonal, en forma de triángulo. Después, con los extremos más largos, rodea tu cabeza y anuda: ¡y listo!  Si doblas tu pañuelo vaquero en forma de cinta, y llevas el cabello recogido con un moño o una cola de caballo, la bandada anudada alrededor del recogido quedará fenomenal. Y para un look refrescante y de inspiración hippie, la bandana también puede usarse como turbante o cinta alrededor de la cabeza.

 

Complementando el bolso

Independientemente de su tamaño o estilo, cualquier bolso puede conseguir un plus y verse diferente con una bandana anudada en una de sus asas. Bolso cruzado, al hombro, de playa… Desde los bolsos más chic a los más desenfadados, una bandana siempre suma. En el caso de los capazos pequeños, el pañuelo vaquero también puede colocarse en su interior, como un forro, y que sus bordes sobresalgan.

Los colores y estampados de las bandanas

Si bien el diseño que más caracteriza a las bandanas es el estampado Paisley, cuyo origen remonta a Cachemira, India, también hay otros diseños tan originales como sorprendentes. ¿Ejemplos? Bandanas de estilo americano con silueta de vaquero montado en un caballo salvaje, pañuelos western con calavera de vaca,  pañuelo bandera USA con iconos americanos, bandanas con mosaicos de tribus nativas , bandanas “camuflaje” Urban… Y todos los modelos, en diferentes colores y a un precio irresistible, los encontrarás en Corbeto’s.

¿Los colores? Blanco, negro, granate, azul marino, azul claro, desgastado, turquesa, verde, naranja, marrón, violeta, gris oscuro…. Por supuesto, todas las bandanas son estampadas, lo que supone que como mínimo incorporan dos colores distintos, aunque sea uno el que predomine.

Las bandanas combinan con facilidad, pero para que resalten o para que queden discretas, dependiendo del efecto que busques, tendrás que tener en cuenta algunos detalles. Por ejemplo, si tu pañuelo vaquero es del mismo tono que tu ropa o cabello (si lo llevas en la cabeza), su efecto será más discreto.

En el caso de que la bandana sea de un color muy intenso o su estampado sea llamativo, procura que el resto de las piezas de tu look sean más bien neutras o lisas, o al menos que su color combine con el de tu pañuelo. Y como último consejo, además de recomendarte que descubras ahora mismo nuestros pañuelos y bandanas en la web Corbeto’s, no te conformes con una sola: son tan irresistibles y llevaderas, que tendrás más ocasiones para lucirlas de lo que imaginas.